El cromo es un elemento químico con número atómico 24, peso atómico 52 y fue descubierto en 1797 por Louis Nicolas Vauquelin.
Es un metal de color gris brillante, muy duro, que se funde a unos 1875 ° C, hierve a 2672 ° C; y se utiliza en el cromado y como parte de las aleaciones de metales.
El recubrimiento de cromo consiste en cubrir con una fina capa de éste en superficies metálicas, con fines de protección contra la corrosión causada por los agentes atmosféricos, para conferir también la dureza superficial y resistencia al desgaste superior y para mejorar la apariencia estética del objeto que se está cromando.
El cromado, actualmente es esencial en muchas aplicaciones de uso común, y logra ser muy útil tanto para equipos industriales destinados a la transformación de materiales plásticos, por permitir mayor adherencia.
Las aleaciones de cromo son de diferentes tipos y para el uso común generalmente se realiza la unión con níquel para aumentar la dureza, resistencia a la corrosión y también para aplicaciones eléctricas.
También se utiliza en la fabricación de elementos que tienen gran resistencia a las temperaturas y presión alta. Las sales de cromo se utilizan como pigmentos, como agentes de curtido, como mordientes en tintorería, en la fotografía en color, cerámica, etc.
El cromo también se utiliza en funciones terapéuticas a través del ácido crómico y cromo como tal para aplicaciones exteriores, lo verás en tratamientos para verrugas, callos, etc. o astringentes para combatir la gingivitis.
La absorción de los compuestos de cromo causa lesiones degenerativas del riñón diarrea y vómitos.
También se utiliza como pigmento en vidrio, cerámica, la impresión de billetes de banco, como catalizador, especialmente con óxido de cobre (síntesis de metanol, la ciclación de hidrocarburos etc.). El ácido crómico, se comporta en realidad como el dióxido de un ácido muy fuerte, similar al ácido sulfúrico.