El termino “paradigma” etimológicamente proviene de la palabra griega paradigma (παράδειϒμα), la cual esta formada por el prefijo “para” y la palabra “deigma” que quiere decir modelo o ejemplo.
Es así que podemos decir que paradigma es un ejemplo, modelo o patrón de algo. Para que el concepto quede más claro podríamos decir que muestra un modelo que servirá de inspiración para futuros casos similares.
La palabra paradigma también es utilizada para definir un punto de vista específico sobre una situación o realidad.
Con este significado es que este término se ha comenzado a usar en estos últimos años en la ciencia y psicología. Fue el científico Thomas Kuhn quien le dio este nuevo significado a la palabra para indicar la práctica o disciplina correcta en el ámbito científico. En su libro «La estructura de las revoluciones científicas» uso el termino de paradigma para referirse a conocimientos o teorías científicas con las que se han conseguido logros y por lo tanto deben ser modelos para investigaciones futuras.
Todo lo que sea considerado como un paradigma debe respetarse, observarse y mantenerse. Quizás alguna vez has oído hablar sobre un “cambio de paradigma”.
Para los científicos esta es una frase que no desearían oír ya que, si bien significa una evolución, necesitan dar un giro total al tema que se esta tratando para comenzar desde cero y plantearse nuevamente el punto de vista que era considerado un modelo predeterminado y realizar una nueva investigación para saber si es correcto o no, por lo general siempre se da este ultimo caso ya que por algo surgió la duda y el cambio.
En el campo psicológico, los paradigmas son esas ideas y creencias que se forman en la etapa de la niñez.
Todas las personas tenemos paradigmas mentales que fueron infundidos por nuestros padres y la sociedad durante los primeros años de la vida. Es así que crecemos con estas ideas, actuamos y nos dirigimos en la vida en base a ellas.
Para cualquier persona se hace muy difícil aceptar que tenemos un paradigma errado, mucho mas reemplazarlo por uno nuevo. Estas creencias están tan clavadas en nuestra mente que es como si ya formaran parte de nosotros pero no es imposible cambiarlas si contamos con ayuda psicológica.
Los paradigmas también son utilizados en leyendas y fabulas. Estas historias populares que, por lo general, tienen años y años de antigüedad y se trasmiten de boca en boca de generación en generación, relatan un suceso ficticio que finaliza con una conclusión, más conocida con el nombre de moraleja.
Estas enseñanzas son consideradas como patrones de conducta y moral en la que deberíamos reflexionar.
En lingüística y gramática, se llama paradigma a un grupo de elementos que pueden ocupar la misma posición en un determinado entorno o contexto, pudiendo ser verbos o sustantivos.
Los paradigmas también se utilizan en el campo de ciencias sociales, enfermería, educación, programación, meteorología, economía, diseñadores, entre otros.
Además de utilizarse en la vida cotidiana para marcar ejemplos de moralidad y buena conducta que se tendrían que repetir en la sociedad.