La expresión corporal consiste en el acto que usualmente desarrollan figuras tales como mimos, artistas y bailarines. Este acto radica en el uso del cuerpo para manifestar emociones, pensamientos y percepciones. Debido a esto, un artista representa miedo, regocijo o amor en una obra mucho mejor con el cuerpo que con términos o pronunciando un texto.
Usualmente, es fundamental para los que practican con su cuerpo este tipo de expresión tener un buen físico, debido a que exhiben de forma permanente su cuerpo y esta actividad puede conllevar un gran esfuerzo físico, según el acto que se realice.
Los individuos que practican con la expresión corporal más que con la expresión oral pueden llegar a desenvolver expresiones más profundas y sentidas que el resto de las personas.
Algunas de las ventajas de la expresión corporal incluyen el desenvolvimiento de la autopercepción, las capacidades comunicacionales y la conciencia del organismo. De igual forma, se considera un modo diferente de hacer ejercicios, pese a que no es su objetivo principal.
La expresión corporal no se refiere solamente a una actividad artística. Todas las personas, e inclusive algunos animales, manifiestan sus pensamientos o emociones con su cuerpo.
Tipos de expresión corporal
Mímica
La mímica consiste en un modo de expresión fundamentada en movimientos fisonómicos y corporales, junto con ademanes. Mediante la mímica, un individuo puede manifestar sentimientos e ideas sin requerir el uso del lenguaje hablado, sólo utilizando las señas.
Las obras de mímica se presentan desde el período de los romanos y los griegos en la antigüedad. Para estas sociedades el mimo era impostor del género cómico más bajo, un bufón, experto en la gesticulación y en copiar las escenas generadas diariamente. En la actualidad es considerada una actividad creativa e innovadora que pone en juego las capacidades comunicativas y expresivas del lenguaje no oral.
Gestos
Los gestos son modos expresivos que no engloban la utilización de palabras, se fundamentan en expresiones faciales, en movimientos, en modos de contacto corporal, algunos de estos pueden abarcar sonidos o chirridos, esto se determinan mediante la aceptación usual de lo que un ademán supone y de los acontecimientos en los que se emplea.
Gestos emblemáticos
Los gestos emblemáticos son ademanes que se generan de forma intencional y cuyo concepto es muy preciso y específico, debido a que el gesto manifiesta una palabra o conglomerado de términos destacables.
Este tipo de gestos son interpretables de forma directa en palabras, o sea, que poseen una interpretación verbal muy precisa y no requieren el empleo de términos y que son entendidos de forma perfecta sin ninguna clase de explicación.
Gestos ilustradores
Los gestos de tipo ilustradores consisten en las señas que son parte de un discurso, y al mismo tiempo lo desarrollan. Se utilizan para manifestar de forma visual lo que se quiere expresar. Están fuertemente vinculados con la sinceridad.
Estos gestos se generan de manera automática, pocos segundos antes que los términos a los que acompañan. Son parte de la personalidad del hablante, por lo que se debe tener cuidado cuando estos se cambian de forma intencional, para que no se conviertan en señas artificiales.
Gestos adaptadores
Los ademanes adaptadores son las señas que se hacen tocando el cuerpo o palpando diversos objetos que estén cercanos a la persona.
Están relacionados estrechamente con el control de las emociones de la persona. Se aumentan con la ansiedad o el estrés. De igual forma, los gestos adaptadores sirven para dominar o reducir el estado de ánimo, o para mejorar los niveles de concentración.
Gestos reguladores
Los gestos de tipos reguladores consisten en los empleados para permitir la circulación de la comunicación y para hablar con los demás. Con estos ademanes se expresa que el hablante concluyó su intervención o que el mismo espera una respuesta.