Un implante dental es una raíz artificial que simula perfectamente a la raíz de un diente natural.
Este se utiliza para sustituir un diente con todo y raíz. Frecuentemente tiene la forma de tornillo y se instala en el hueso maxilar o de la mandíbula. En estos es donde se coloca el diente artificial.
Son fabricados en base a titanio. Se coloca en el hueso de la mandíbula y en los huesos maxilares, bajo el tejido de las encías.
Características de los implante dentales
- Se logran integrar perfectamente en el hueso.
- No genera efectos secundarios en el paciente.
- Son elaborados en base a titanio.
- Su diámetro y longitud depende de la cantidad de hueso.
- Poseen un sistema anti rotación externo y uno interno.
- Con una adecuada higiene duran más de 20 años.
Partes de un implante dental
- El pilar o emergente, también conocido como muñón. Es la conexión que se crea entre el tornillo y la corona dental, que en este caso es la estructura protésica.
- La corona dental o prótesis, es lo que se ubica sobre el tornillo y el pilar, el cual sustituye por completo el diente natural o pieza perdida. Esta a pesar de formar parte del implante nunca se comercializa junto, más bien se vende por separado.
- El tornillo o implenate dental, es lo que se inserta en el hueso maxilar o de la mandíbula.
Tipos de implantes dentales
Implantes dentales endo-éseos
Es el tipo de implante que se coloca dentro del hueso de la mandíbula o de los huesos maxilares. Es el más utilizado en la actualidad debido a su durabilidad. Para su colocación primero se debe de instalar el implante y luego se colocar la corona o prótesis, que es lo que dará el aspecto final al diente.
Los implantes endo-óseos se pueden instar de varias formas, como:
- De forma cilíndrica.
- En láminas.
- Roscado o tornillo, que es la opción más empleada hoy día.
Estos implantes los suelen utilizar aquellas personas que presentan puentes, o que tienen prótesis dentales que pueden ser extraídas.
Implantes dentales subperiósticos
También llamados como implantes tuxta-óseos. Se trata de un marco de metal que es ubicado justo en el hueso de la mandíbula, quedando bajo el tejido de las encías. Estos implantes presentan la misma forma de la orilla del hueso, lo cual permite que la pieza dental sea colocada perfectamente.
Es el tipo de implante que se suele utilizan en personas que tienen muy poca altura ósea, lo cual le imposibilita el uso de los implantes endo-óseos.
Tipos de implantes endo-óseos
Implantes endo-óseo cilíndricos
Se trata de implantes que tienen una forma cilíndrica, los cuales se colocan en el interior del hueso. Poseen diversas perforaciones de pequeño tamaño que permite que el hueso se siga desarrollando, facilitando que el implante dental quede perfectamente colocado.
Para realizar este tipo de implante dental el especialista debe de utilizar un bisturí, y el tiempo que dura el proceso suele ser muy lento, ya que se debe buscar la forma de que se integre en totalidad el implante al hueso.
Este tipo de implante es poco utilizado en la actualidad.
Implante endo-óseo de tornillo
Es el implante que más se está utilizando en la actualidad. Se presenta como un tornillo que se fabrica en base a titanio, que es un metal bio-compatible. Este implante se puede colocar tanto en uno como en varios dientes uno al lado del otro.
Estos hoy día se logran adherir mucho mejor al hueso donde se realiza el implante, ya que se suele alterar sus superficies con un Titanium Plasma Spray. Con esta alteración se disminuye el tiempo de integración, consiguiéndose resultados más efectivos.
Implantes endo-óseo laminados
Estos al igual que los cilíndricos son poco utilizados. Se emplean cuando el paciente presenta una pérdida total del diente. Con estos se llega a sustituir un diente incisivo central en el maxilar superior. Este tipo de implante se emplea en pacientes que presentan un hueso muy profundo y ancho a la vez.
Implantes dentales de carga inmediata
También se suele conocer como implante de primera fase. Es el implante donde el especialista no tiene que abrir la encía para colocar el pilar, ya que se introduce directamente en el alvéolo. En este se instala el implante y luego se coloca la pieza dental artificial.
Implantes dentales de segunda fase
Se trata de una intervención quirúrgica donde el especialista recurre a dos fases para la sustitución de la pieza dental.
Primero se inicia con la colocación del implante en el hueso, sea en el maxilar superior o en la mandíbula inferior. Y luego se atornilla el pilar o muñón sobre el implante colocado, y posteriormente se cementa la corona.
Antes de atornillar el muñón se debe dejar esperar entre 3 y 4 meses, si la intervención fue en la mandíbula inferior, y de 5 a 6 meses, si fue en el maxilar superior. Durante este tiempo el paciente deberá estar bajo tratamiento.