La música y la moda siempre han estado intrínsecamente vinculadas, la cultura pop está creada por una sincronización de lo que la gente usa y lo que escuchan y cuando lo hacen, luego entonces, la moda y la música son las plataformas con las que la gente puede expresarse, y las dos van de la mano.
Desde los años 50 y el rock’n’roll, a través de todo el camino de la música de rock hasta hoy, es evidente que un género, sonido o incluso un solo artista puede moldear la forma de vestir, la historia ha visto una magnífica ola de tendencias de la moda, y una no parece necesariamente seguir a la otra, sino que simboliza el estado de ánimo de la música y la gente en ese momento.
Lo que se conoce como la moda rock abarca muchas otras modas más específicas: la moda del rock and roll en los cincuenta, la moda a-go-go de transición, luego la moda hippie de los sesenta, para llegar a la moda punk de los setentas que dio paso al glam y luego a la música disco para culminar en los ochenta con una explosión de creatividad y tendencias retro que dio paso al grunge de los noventa y las modas retro de los dos miles: el goth como ejemplo más puro.
A su vez, la moda rock implica una moda urbana que se retoma de las calles para aplicarse por diseñadores a la industria del vestido, haciendo una rica gama de ropa, calzado y accesorios en general que reflejan perfectamente la evolución del rock como género musical y medio de expresión por excelencia, un medio de expresión que rezuma libertad, energía y rebeldía a través de los años.
La chamarra de cuero, los jeans desgastados, las botas militares, algo brillante, las gafas de aviador, las muñequeras de cuero, las minifaldas de cuero negro pegadas, los sombreros, etc.; todos artículos que definen el estilo rockero.